Identificar el problema.

Llevo varios días mal, triste, apático, con los sentimientos a flor de piel y lo que más me jodía de todo es que no sabía porque me sentía así de mal, si todo va bien, si todo está bien, y sin ganas de nada, porque ahora estoy tan jodidamente triste, y cuando algo no lo entiendo me carcome por dentro porque no sé cómo solucionarlo siendo el motivo por el cual mi batalla conmigo mismo se recrudece.

Esta noche después de mucho buscar en mi interior y de examinar todo lo que me estaba pasando me dí cuenta por fin de lo que ocurría, eso sí tuve que retroceder mentalmente varios días (más bien fue dos semanas) analizando lo que hice, dándome cuenta cuanto estaba bien, menos bien y para él arrastre, hasta que finalmente detecte el patrón, aún estaba metido en mi universo interior viendo la película que se mostraba, como si estuviera sentado en una pantalla gigante de cine viendo una película marcha atrás, mirando he inspeccionando y tomando apuntes, solo que esta película era la de mi vida.

Pongámonos en situación, yo sentado en un cine de pantalla gigante dentro de mi mundo interior, pero no era un cine moderno que quede claro, era un cine de los antiguos, un teatro reconvertido super bonito decorado, al cual en otros momentos las paredes y filigranas de escayola estaban recubiertas de pan de oro, pero que se pintaron para que no brillara con las películas. Estando así sentado llevando dos semanas dije mmm interesante creo que ya lo veo (pensé coño puedo ir para adelante y verlo desde ese punto en orden, me respondí subnormal profundo estas en tu mundo puedes hacer lo que quieras solo te limita tu mente), por lo tanto empecé a reproducirlo adelante, y el patrón quedó claro muy claro, y encontré el cabrón que me estaba saboteando.

Lo que estaba pasando que mi cuerpo quería que comiera, quería que se llenara innecesariamente ya que, comer como, solo que no ni la cantidad anormal, que comía antes ni las mierdas azucaradas, y mi cuerpo el cabrón me estaba saboteando para que cediera, pero va a ser que no, lo tengo claro en mi mente y se cual es mi objetivo, lo tengo tan claro como esto que estoy escribiendo, no voy a decepcionar a la gente que le he prometido bajar, empezando por mi mismo, ya que sé que está lucha no estoy solo pero si que tengo que afrontarla.

Como no, cobró más sentido para mí, mientras veía la película, la frase siguiente:

Estoy haciendo muchos cambios en mi vida últimamente, sé, entiendo y comprendo que los cambios producen otros cambios para compensar los nuevos, no puedo dejar de ser gordo sin dejar de ser vago o exigirme más, cambios en la mentalidad de luchar por seguir, ser más «egoísta», pensar más en mí primero y luego los demás, y no solo pensar que un cambio no solo se limita a una comida o unos ejercicios que hay que cristalizar y fusionar cuerpo, mente y alma, y por lo tanto mi cambio interior claramente tiene que ir acompañado con un cambio exterior, mi forma de vestir, mi forma comportarme, hacer cosas que no me gustaban porque las tengo que hacer, y obligarme ir más allá y rebasar mi límite. En el gimnasio me obligó a 20 minutos de esquí, y mi cabeza me quiere sabotear, pero ya empieza a saber que no cederé, ya me empieza a dar por culo cuando llevo 10 minutos, pero va teniendo claro que no cederé, aunque termine con las piernas temblando y sudando a más no poder, pero te ganare (bueno ya le he ganado pero él no lo sabe).

En fín amigos en resumen es que tenía «hambre» y quería mi cuerpo que comiera, así que recurrí como he leído hace poco, a mi tarro de las galletas y he saboreado un momento de los que disfrutaba comiendo ganando así fuerzas y diciéndole a mi cuerpo te voy a hackear cabrón de mierda.

Y ahora amigo a ponerme música hacer las cosas de casa y disfrutar del momento, y esta noche de madrugada saldré a caminar, porque la noche es para mí, mi fiel compañera.

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