“En otros términos, mientras uno trabaja sobre el cuerpo físico, hay que trabajar simultáneamente sobre el pensamiento y sobre las emociones, mientras uno trabaja sobre el pensamiento hay que trabajar sobre el cuerpo físico y las emociones, mientras se trabaja sobre las emociones, hay que trabajar sobre el pensamiento y sobre el cuerpo físico.”
En este punto de la vida, estoy actualmente por de manera casual o no, porque todo tiene que pasar y todo tiene que suceder, ya no sé qué pensar, pero creo que sí, la vida me ha estado preparando para llegar a un destino, que sé que voy a llegar, no sin esfuerzo claro está, pero si consciente de todo lo que me queda por hacer, pero tengo mi hoja de ruta y a por ella que voy.
Está claro que todo es mantener un equilibrio, todo yin tiene su yang, recordar que nunca hay luz sin oscuridad, todo tiene que estar compensado, se puede hacer como el faquir, yogi o monje, pero estas solo se centran en un punto de vista, dejando de lado las demás habilidades, quedándose en muchas ocasiones a las “puertas” del destino.
El cuarto camino trata del equilibrio y de alimentar a las tres a la vez, en este punto me encuentro, cuidando mi cuerpo, alimentando mi mente y cuidando mi “fe”, sé que esto me llevará mucho tiempo adaptarme y conseguirlo, pero sé que al final me dará la paz que necesito.
Nota de mi yo del futuro:
Después de escribirlo y de llegar a casa del gimnasio, me he dado cuenta que lo voy haciendo en 3 partes en el trabajo en el gimnasio y en casa. En los tres sitio fomento una mas que otra pero estoy viendo como hacer las tres a la vez, o sera en un día hacer las tres, ya lo descubriré, todo es seguir.